Las baterías Li-ion de bajo costo ofrecen soluciones asequibles de almacenamiento de energía gracias a sus procesos de fabricación y materiales optimizados. Como resultado, estas baterías aún funcionan bastante bien con una densidad de energía adecuada y una vida útil en ciclos razonable. Son aplicables en electrónica de consumo, almacenamiento de energía solar a pequeña escala, vehículos eléctricos económicos y otros dispositivos donde la relación con el costo es importante. Su rendimiento es bastante bueno considerando el precio, lo que las hace muy útiles.